La Diputada Celeste Rivas (Bloque PRO-MID) presentó en la Legislatura un proyecto de Ley para que los estudiantes de secundaria realicen Prácticas Educativas Obligatorias en Ámbitos Laborales.
El programa tiene como objetivo que los estudiantes vivan una experiencia en un ámbito laboral fuera de la escuela. De esta manera se propone acercar a los jóvenes al mundo del trabajo, lo cual es sumamente importante para que puedan desarrollar habilidades y capacidades necesarias para potenciarlos de cara al futuro, al finalizar el secundario.
Las prácticas educativas en ámbitos laborales serán obligatorias, con una carga mínima de al menos 20 hs reloj en el año y los alumnos y alumnas podrán realizarlas en organizaciones tanto públicas como privadas, con las cuales las instituciones educativas deben acordar previamente.
El proyecto además establece que dichas prácticas educativas se pondrán en práctica de forma progresiva, comenzando por los estudiantes del último año de secundario, para luego ir implementándolas en todo el ciclo orientado.
Esta propuesta se enmarca en las leyes de Educación Nacional y Provincial, las cuales establecen que el Ministerio de Educación propiciará la vinculación de las escuelas secundarias con el mundo de la producción y el trabajo, y en este marco, podrán realizar prácticas educativas los alumnos de todas las modalidades y orientaciones de la Educación Secundaria, mayores de dieciséis (16) años de edad.
Quedan al margen de este Programa las Escuelas técnicas, ya que estas vienen implementando las prácticas profesionalizantes. Por ello, es muy importante que el resto de las escuelas secundarias comiencen a implementar este tipo de prácticas para cumplir con la igualdad de los estudiantes.
“Me parece fundamental que la escuela les brinde a los estudiantes las herramientas básicas para que puedan desarrollar su proyecto de vida, en este caso, prepararlos también para el mundo del trabajo. Hoy las organizaciones públicas y privadas demandan sujetos capaces de desarrollar al máximo las capacidades blandas, es decir, aquellas como la creatividad, el trabajo en equipo, resolución de problemas y pensamiento crítico.”
“Además estas experiencias forman también en valores y aptitudes fundamentales para un trabajo, como por ejemplo: la responsabilidad, la puntualidad, la organización, la división de tareas, la presentación, la asignación de roles, entre otros”.