La Unidad Piquetera pide una reunión con Batakis para pedir “un bono compensatorio por la inflación de $20.000”, mientras que el MTE de Grabois y el Movimiento Evita exigen la aprobación de un Salario Básico Universal.
En medio de una economía con números en rojo y un rumbo político inestable, la calle parece ser el nuevo escenario de disputa a partir de ahora. Con la CGT a punto de volver a la acción tras dos años de quietud (y sin paros generales), los movimientos sociales –tanto troskistas como oficialistas– tienen decidido aumentar su caudal de manifestaciones y hoy coincidirán con sus respectivas marchas en el centro de la Ciudad de Buenos Aires.
La Unidad Piquetera, que nuclea a unos 25 movimientos sociales ligados a la izquierda, se movilizarán hoy a la Plaza de Mayo. En esta ocasión, pedirán “un bono compensatorio por la inflación de $20.000 para jubilados con la mínima, trabajadores no registrados por debajo de la canasta básica” y programas sociales y “un salario mínimo que supere el ingreso básico” (hoy $100.000). Además, pedirán una reunión con la nueva ministra de Economía, Silvina Batakis.
“El gobierno del Frente de Todos hizo una pausa en su interna para apoyar la designación de Batakis. La ministra antes que nada hablo con Cristalina Giorgeva, la mandamás del FMI y esta le dijo lo mismo que siempre dice el FMI, más ajuste y más rápido”, expresaron en un comunicado. “A las y los trabajadores no nos queda más que unirnos y profundizar la lucha”, agregaron.
Desde agosto del año pasado, referentes piqueteros del Polo Obrero, Barrios de Pie- Libres del Sur, Frente Organizaciones en Lucha (FOL) –entre otras organizaciones– se reunieron hasta ocho veces con el ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta. Temas como el aumento de los planes, la apertura de los programas sociales de trabajo (Potenciar Trabajo) y mayores partidas alimenticias a los comedores, sin embargo, han quedado inconclusos y derivado en múltiples movilizaciones.
Desde las 11 de la mañana, en este caso, se instalarán frente a la Casa Rosada. Irán en tres columnas desde el Conurbano bonaerense que ingresarán por la Avenida de Mayo, la Avenida Belgrano y el Obelisco. “Exigimos un paro y un plan de lucha a las centrales sindicales por el salario mínimo y por un bono de emergencia que sea un paliativo a la topadora de la inflación que se lleva puestos los salarios”, remarcaron. En caso de no tener una respuesta satisfactoria de Batakis, la decisión es acampar en Plaza de Mayo.
Las organizaciones sociales que forman parte del FdT, por su parte, se trasladarán al Congreso de la Nación, donde presionarán por el tratamiento de un proyecto de ley sobre el Salario Básico Universal. Descartado hasta el momento por el Ejecutivo y en stand by en el recinto legislativo, esta medida fue presentada por diputados del Frente Patria Grande ligados a Juan Grabois, también líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), que pretenden adjudicar un ingreso mensual de $14 mil destinado a cerca de 9 millones de personas de sectores sociales vulnerables.
Esta protesta comenzará a las 10 y se extenderá hasta las 15 horas. Habrá dirigentes, legisladores y demás referentes sociales oficialistas. Además del MTE, también participarán otras organizaciones oficialistas como Movimiento Evita, la facción kirchnerista de Somos Barrios de Pie, la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP), el Movimiento Popular Darío Santillán y la Corriente Clasista y Combativa (CCC). Este último, por ejemplo, cuenta con el liderazgo de Juan Carlos Alderete, diputado nacional e integrante del bloque del Frente de Todos.
“Desde la UTEP seguimos exigiendo un paquete de leyes que pongan en valor nuestro trabajo e impulsen medidas necesarias y urgentes para transformar la realidad concreta del sector más postergado, que trabaja genuinamente y sin derechos en un marco comunitario de cuidado de la casa común”, sostiene el comunicado de la organización popular que alberga a las organizaciones que integran el Frente de Todos.
Tras el último cimbronazo en el interior del Gobierno Nacional, que alcanzó su pico máximo de tensión con la salida de Martín Guzmán del Palacio de Hacienda, las diferentes organizaciones sociales tienen decidido compartir la calle e incluso mancomunar reclamos. Ayer, en la estación de Constitución, el MTE realizó una asamblea de la que participaron tanto Juan Grabois –cercano a Cristina Kirchner– como Eduardo Belliboni, del Polo Obrero, en un nuevo gesto de unión que marca la hoja de ruta que se viene y que promete perdurar durante los próximos meses.