Los resultados fueron negativos en el cotejo con Pablo Parra, vecino de la Agustina Fernández y dueño de la vivienda donde se produjo el ataque. Fueron comparados con otros perfiles, pero se desconocen las identidades.
El Ministerio Público Fiscal confirmó que se cotejaron rastros de ADN obtenidos de cuerpo de la joven estudiante asesinada en Cipolletti. Indicaron que hay huellas genéticos de un hombre y que fueron cotejados con muestras de Pablo Parra, el vecino y último que vio con vida a Agustina Fernández antes del brutal ataque. La fiscalía informó que no hay coincidencia, lo cual afianza la teoría de los investigadores que el principal sospechoso es el sujeto del identikit.
Las muestras fueron extraídas de la joven de 19 años que fue brutalmente atacada el 2 de julio pasado la vivienda de Parra, en un complejo ubicado en la calle Confluencia al 1301, en la zona del Parque Industrial. Como también informó días atrás este medio, las muestras se cotejaron con otros perfiles genéticos, pero que no fueron informados por el Ministerio Público. Los rastros fueron extraídos del cuerpo de la joven ya que no se encontraron otros indicios en la vivienda.
Según la información oficial el cotejo y análisis de las medidas se desarrolló en el Laboratorio Regional de Genética Forense de Bariloche. Culminó en la jornada de ayer el informe de los rastros de ADN enviados. El material genético fue hallado en las uñas del dedo índice de la mano derecha de la víctima y en el dedo pulgar de la mano izquierda.
En ambos «se obtuvo un perfil genético mezclado, perteneciente a la mezcla de material genético de por lo menos dos individuos. En el mismo se puede observar en forma mayoritaria y completa el perfil genético obtenido de la muestra de la víctima y en forma parcial y con baja amplificación el perfil genético de otro individuo», indicaron.
El informe destacada que en el pulgar puede corroborarse que el perfil genético que no es el de Agustina, pertenece a un hombre. No obstante las muestras fueron utilizadas para realizar la pericia comparativa con el perfil genético del Parra: “excluyéndolo como aportante”.
«Este resultado, que se sustenta con diversos indicios que ya se cuentan en la causa, han permitido avanzar y consolidar la hipótesis de trabajo de que se trató de un homicidio criminis causae. Por este motivo, la misma sigue siendo la principal línea de investigación del Ministerio Público Fiscal, sin perjuicio que en paralelo se siguen produciendo medidas de prueba en el marco de otras hipótesis», sostiene el informe.
Ante este escenario, los investigadores mantienen su hipótesis principal sobre un femicidio en ocasión de robo y al hombre del identikit como el principal sospechoso. A la joven la atacaron en la vivienda de Parra con quien esa noche iba a compartir una cena. El hombre salió y cuando regresó se encontró con Agustina en el piso inconsciente y muy lastimada. Parra también es una línea de investigación.
La familia convocó a una marcha para este vienres en Cipolletti. El ataque fue en la tarde-noche del 2 de julio y murió el 5 de julio en el hospital local.