Tras la marcha, la central obrera publicó un duro comunicado contra el Gobierno: «No somos la casta, somos los trabajadores».
La Confederación General del Trabajo (CGT) se movilizó hoy al Palacio de Tribunales por el mega DNU del presidente Javier Milei y mientras se realizaba la protesta, la Justicia laboral rechazó el amparo presentado por la central obrera.
La resolución se conoció mientras la CGT se concentraba en la Plaza Lavalle, frente al centro del Poder Judicial, y fue firmada por el juez laboral José Ignacio Ramonet. Según el letrado, la medida que solicitada fue denegada porque el polémico DNU N°70 todavía no está en vigencia.
«No encuentro que se den razones graves y objetivamente impostergables, que habiliten el dictado de una medida cautelar ´interina’, considerando para ello que la norma todavía no entró en vigencia, y que, de hacerlo solo afectaría a las situaciones que regula a partir de su vigencia, pudiendo, además, ser motivo de cuestionamiento en los procesos individuales que puedan suscitarse con motivo de su aplicación», argumentó Ramonet.
El documento de la CGT: “No somos la casta, somos los trabajadores”
Desde el palco apostado en Plaza Lavalle, autoridades de la Confederación General del Trabajo (CGT) dieron lectura al documento elaborado por los distintos gremios que apunta contra las medidas de ajuste del Presidente y solicitan que el DNU sea tratado en el Congreso.
«El presidente prometió hacer un ajuste que lo pagaría lo que él denomina ‘casta política’ y que los trabajadores recibiríamos los beneficios de ese recorte. Pero su primer acto de gobierno es un DNU que, entre otras muchas medidas arbitrarias, anticonstitucionales y lesivas de un vasto número de derechos civiles, comerciales y sociales, introduce una feroz reforma laboral regresiva cuyo único objetivo es disciplinar a los trabajadores, cercenar la actividad sindical y solo privilegiar intereses empresariales», denunciaron.
En otro pasaje del texto, los sindicalistas remarcaron que «el orden y la libertad de una República comienza por el irrestricto respeto hacia la Constitución Nacional y al equilibrio de los tres poderes del Estado», y cuestionar los preceptos de necesidad y urgencia que atribuye el fundador de La Libertad Avanza para impulsar el paquete de reformas.
«Arrogarse facultades legislativas, que no son de su competencia, y utilizar toda esa fuerza para arrasar con la legislación laboral», indicaron al tiempo que plantearon que cualquier plan de Gobierno que exija modificación, derogación o creación de leyes debe, imprescindiblemente, pasar por el debate parlamentario.
Para la CGT, el DNU de «desregulación» de la economía «está viciado de origen y por lo tanto es nulo de toda nulidad», por lo que le exigieron a la Justicia que cumpla con la función de contralor del Poder Ejecutivo y declare lo inconstitucional.
La movilización de la CGT
Pasadas las 10 de la mañana, comenzaban a llegar al Palacio de Tribunales las primeras columnas de los sindicatos nucleados en la CGT y organizaciones que se plegaron a la manifestación.
El martes, la cúpula de la central obrera le había solicitado al Gobierno de la Ciudad y al Ministerio de Seguridad de la Nación el permiso para poder manifestarse.
A las 13 horas y tras la lectura del documento, los manifestantes empezaban a desconcentrar el centro porteño.
Según el ministro de Seguridad de la Ciudad, Waldo Wolff, la CGT «cumplió con lo que pidió» y explicó: «Nosotros le permitimos, en función de la convocatoria y durante media hora, desplazarse un poquito más de la plaza porque no entraban en las calles linderas».
«Se cumplió con el objetivo que las arterias principales durante todo el tiempo estuvieran liberadas. En algún momento, hubo algún bypass producto de la lógica de permitir la desconcentración y el desarrollo del acto», contó Wolff en diálogo a la prensa.